Las vacaciones son un período muy importante y anhelado por los niños, porque significa que van a poder estar mucho más tiempo con sus ídolos, sus referentes, las personas que más quieren: sus padres.
Pero hasta que esto pueda ser, hasta que papá y mamá cojan las suyas, conviene que las vacaciones de los peques estén lo más organizadas posible, para que ese período sea algo que vivan y recuerden como algo entrañable de su niñez.
Así pues, es conveniente no dejar al azar, a la improvisación, este tiempo de espera. Sentémonos con ellos y expliquémosles nuestro plan de actuación vacacional. Y en ese tiempo de espera, cada día a la vuelta del trabajo, tened siempre un ratito especial para dedicárselo hasta que vosotros podáis tener vuestras merecidas vacaciones.
Y entonces sí, disfrutad al cien por cien con vuestros retoños.
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