Hola amigos:
Como estamos en época estival, de relax, vamos a aprovechar estas fechas para trabajar aspectos que quizás durante el curso escolar, y por el propio ritmo acelerado de nuestras vidas, no hacemos mucho hincapié.
Quiero pues, desde este rincón, dar algunas pautas de cómo deben comportarse los niños cuando van a algún establecimiento, restaurante o mismamente a la playa…
Con estos pequeños poemas, relatos o cuentos, que iré publicando, y que podéis contar a vuestro hijo, o incluso él mismo puede leer (y de paso practica la lectura), vuestro hijo aprenderá normas de urbanidad y buen comportamiento. Va a ser como unas pequeñas lecciones de protocolo y saber estar.
Animadlo a que lo lea, o leérselo vosotros y luego, hacedle preguntas sobre la lectura para comprobar si ha atendido y si lo ha comprendido. De igual forma, cuando vayáis a disfrutar un día de playa, tendréis que hacerle memoria del poema, para que ponga en práctica lo que en él decía.
Veréis como estos pequeños relatos, os sirven para muchas cosas: comunicaros con vuestros hijos, darles normas de urbanidad y buen comportamiento, practicar la lectura y su comprensión…
Venga, ahí va:
Unos papás y su hijo, a la playa quieren ir.
Los tres con sumo cuidado, bien preparados debéis salir.
El bañador todos se ponen, la toalla, la sombrilla y también el protector,
no vaya a ser que a Lorenzo le dé un poquito de ardor,
sus rayos se alboroten y le den por mucho brillar,
y las ampollas en la piel, luego les hagan rabiar.
Deciden ir en Bus, así adelantan más,
ya que suele haber mucha gente y cuesta de aparcar.
En el Bus debes comportarte, y nunca molestar.
Nada de gritos y bien sentados, no vayas a incordiar.
Llegamos a la playa, miramos y decidimos qué lugar ocupar.
Pero no te pongas pegado a nadie, pues el espacio debes respetar.
Cuando juegues en la arena, vete a la orilla del mar,
allí la arena está mojada, y si hace un poco de aire, no la levantará.
Tampoco levantes la voz, si quieres a los papás llamar.
Si quieres decirles algo, anda un poquito y los encontrarás.
Y de andar va la cosa. No se te ocurra correr,
porque la arena levantas, al levantar también tus pies.
Y puedes molestar, al que, plácidamente esté tumbado.
Por no decir que lo dejas, como un pescado rebozado.
Sigue estas reglas básicas, para un buen día de playa pasar.
Que no tengan que sacarte los colores, ni a ti, ni a tus papás.
Y no olvides que a la playa, se va a disfrutar.
Pero tanto tus papás y tú, como todos los demás.
Coge un punto de referencia:
una sombrilla, un edificio o el nombre de un bar.
No vaya a ser que te despistes,
y os llevéis un buen susto, tanto tú como tus papás.
Si esto ocurriera, no te pongas a llorar.
Mantén siempre la calma, que alguien te podrá ayudar.
Es bueno que sepas todos tus datos, porque te los van a preguntar.
Nombre y apellidos y también los de tus papás.
También el número de su teléfono para que los puedan llamar.
Y a la otra estate atento y no te vuelvas a despistar.
Que tengas un buen día de playa junto a tus papás.
Y no te olvides que la arena, en la ducha de la playa, debes quitar.
Que de regreso a casa en el Bus, el asiento limpio, debes dejar.
0 comentarios